Érase una vez un gato llamado Zorbas,estaba en el balcón cuando de repente apareció una gaviota que se callo,olía fatal y estaba recubierta de algo negro que apestaba un montón se llamaba petróleo.
Hablo con la gaviota y le dijo que i se encontraba mal que fuese al hospital del zoo allí la atenderían pero ella dijo que ese había sido su último vuelo que se moriría dentro de muy poquito tiempo.
El le dijo que no pensara en esas cosas,ella se lo negó.
Hablo con la gaviota y le dijo que i se encontraba mal que fuese al hospital del zoo allí la atenderían pero ella dijo que ese había sido su último vuelo que se moriría dentro de muy poquito tiempo.
El le dijo que no pensara en esas cosas,ella se lo negó.
El le ofreció de su comida pero no quería,una cosa si le dijo.
Que iba a tener un huevo que como ella no lo podría cuidar que por favor le hiciera tres promesas el asintió con la cabeza diciendo que si.
Las promesas eran que cuando saliera el huevo no se lo comiera,la segunda que cuidara al pollito hasta que saliera del huevo y la tercera que lo enseñara a volar.
Poco después salió un huevo blanco y la gaviota murió.
El gato Zorbas lo cuido muy bien lo que pasa que eso de incubar huevos no se le daba demasiado bien y cada día llamaba a una gaviota distinta,un día cuando le tocaba a la señora Birtús acababa de nacer el pollito y ella le dijo que ya que el era un gato y no sabía cuidar pollitos ella lo podría adoptar y tenerlo en casa como otro de sus demás hijos.
El acepto y el pollito vivió en esa familia la de la señora Birtús.
El pollito se llamo Zorbas júnior ya que el gato Zorbas había dado tanto por el.
1 comentario:
A mi me parece muy mal la contaminación por la causa del petroleo espero que a los demás también os parezca lo mismo.
Por su culpa mueren muchos animales como en este caso la gaviota que estaba a punto de tener un huevo.
Esto hay que remediarlo entre todos porque además de la muerte de animales contamina el medio ambiente.
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